15 de noviembre de 2024
¿Baja el precio de los autos?: cómo impacta la menor brecha cambiaria en los valores de los 0 km
Con una cotización de dólar paralelo en retroceso, comprar un vehículo nuevo implica cambiar más divisas que en julio. Los costos de los fabricantes, en detalle
En la industria del automóvil, como en muchas otras manufacturas argentinas, hay dos componentes que forman el precio de los productos: los costos nacionales y los costos importados. Los costos locales como sueldos, consumos de energía, fletes e impuestos son en pesos, y de acuerdo al índice de precios (IPC), suben todos los meses.
En cuanto a los costos importados, naturalmente, son en dólares. Pero la industria automotriz no trabaja con el dólar paralelo sino con el dólar oficial para todas sus importaciones, sean éstas de partes, insumos o autos completos. El componente de partes importadas de los autos nacionales es de entre el 50 y el 70%. Es decir que en el caso de aquellos modelos con menor impacto, al menos la mitad del costo es en dólares, y desde ahí sube hasta el 100% para los autos terminados (CBU) que se importan, sean desde Brasil o cualquier destino fuera de la región.
“Entre el aumento del dólar oficial y los costos nacionales, esa es la razón por la cual los autos están aumentando aproximadamente un 3% cada mes. Es lo mínimo que tienen que aumentar. Y eso es lo que pasa por tener tantas cotizaciones distintas del dólar. En la medida que todas tengan la convergencia hacia la que están yendo y eso permita que se pueda sacar el cepo, esta distorsión va a desaparecer. Entonces sí, el día que ocasionalmente baje un insumo como el acero, tendría que bajar el precio de los autos porque todos comprarán el mismo dólar. Pero eso no es lo que pasa todavía en Argentina”, explicó un ejecutivo a Infobae.
“Lo que está bajando no es el dólar paralelo sino la brecha entre las cotizaciones. Pero funciona para los dos lados. Cuando la divisa trepó a casi $1.500 y la gente fue con los dólares a comprar autos aprovechando esa cotización, vendió menos dólares porque los autos en pesos aumentaron mucho menos. Ahora pasa el efecto contrario”, explicó otro empresario.Entre la vuelta del crédito a tasas accesibles y la recuperación de los salarios formales en relación con un aumento de precios de los autos cero kilómetro que fue menor a la inflación todos estos meses, las ventas de 0 km superaron las cifras de 2023 en agosto, septiembre y octubre. Noviembre viene bien otra vez. Algunos analistas del sector auguran un noviembre mejor que los últimos cinco años, sólo debajo de las cifras de ventas de 2018. De este modo, podría decirse que la menor brecha no está afectando las ventas de manera sustancial.Es el caso de un Ford Bronco V6, que llega importado por Ford Argentina directamente, y que en septiembre tenía un precio de $153.564.000 y dos meses después se comercializa en 136.090.800 de pesos. Otro ejemplo es el de la Honda CR-V versión LX que en agosto costaba USD 56.000 y en noviembre se vende en pesos a $61.500.000, que hoy equivalen a 53.000 dólares.