15 de enero de 2025
Rugen los motores en NASCAR: el Ford Mustang Dark Horse revoluciona e impulsa la era Next Gen
Con 12 victorias en 2024 y el título de Joey Logano, este auto simboliza una revolución tecnológica que transformó las carreras, analiza la revista Evo
Desde su fundación en 1948, NASCAR ha evolucionado desde competencias en autos casi comerciales hasta convertirse en una de las plataformas de carreras más avanzadas del mundo.
Estas máquinas rudimentarias, que competían con mínimas modificaciones, simbolizaban la esencia de los “stock cars”.
Con sus innovaciones aerodinámicas, estos autos alcanzaron velocidades de 200 mph (321 km/h), marcando el inicio de una era de restricciones técnicas para controlar la potencia.
Para la década de 1990, los vehículos se habían alejado completamente de sus raíces comerciales. Los autos se diseñaron exclusivamente para competir, con cuerpos personalizados y configuraciones que priorizaban la velocidad y la seguridad.La llegada del auto Next Gen no fue solo un cambio técnico; fue una revolución en la forma en que se conciben las competencias.
Con un chasis estandarizado desarrollado por la empresa de autos Dallara, suspensión independiente en las cuatro ruedas y una caja de cambios secuencial de cinco velocidades de la firma Xtrac, estos vehículos sentaron las bases para una nueva etapa de igualdad y competitividad.Además, las ruedas de 18 pulgadas con tuercas centrales reemplazaron las de 15 pulgadas, modernizando aún más el deporte.
“Cuando miras estos autos en los garajes o en las pistas, parecen mucho más parecidos al Mustang Dark Horse que puedes comprar en un concesionario,” explica Richard Johns, líder de rendimiento en Ford Performance.El Mustang Dark Horse, representante de Ford en el Cup Series, se ha convertido en un modelo de excelencia técnica.
Con ajustes específicos para diferentes tipos de circuitos, desde superspeedways hasta rutas con curvas pronunciadas, el equipo detrás de este auto ha perfeccionado cada detalle aerodinámico y mecánico para mantenerse competitivo.“Con el Next Gen, todos los equipos trabajan con el mismo diseño básico. Esto igualó el terreno de juego, pero también incrementó la importancia de los detalles en la configuración y la estrategia,” comenta.
Para Joey Logano, campeón en 2024, el Next Gen representa el cambio más grande en la historia de NASCAR.El nuevo diseño también cambió la dinámica de las carreras. La reducción del “side force”, que antes ayudaba a estabilizar los autos en curvas, hizo que conducir a altas velocidades sea más desafiante, pero también abrió nuevas oportunidades de adelantamiento.
El Next Gen está diseñado para perdurar. Con componentes que podrían adaptarse a futuras tecnologías, como la electrificación, esta generación promete marcar el rumbo del deporte durante al menos una década.
“Los detalles son más importantes que nunca”, afirma Logano. “Desde la estrategia hasta las decisiones del equipo, todo cuenta. Eso es lo que hace que este cambio sea tan emocionante para el deporte.”