10 de marzo de 2025
El ex dueño de la F1 vendió la colección de autos “más importante del mundo”: quién los compró y cuál será el futuro de las reliquias

El magnate Bernie Ecclestone comerzializó unos 69 vehículos valuados en unas 500 millones de libras. El plan para que los fanáticos tengan acceso a verlos
La colección de Ecclestone, iniciada hace más de 50 años, incluye algunos de los coches más emblemáticos de la historia de la Máxima. Entre ellos se encuentran modelos como el Ferrari conducido por Mike Hawthorn, el primer campeón mundial británico en 1958, así como los Ferrari conducidos por leyendas como Michael Schumacher y Niki Lauda. También forma parte del conjunto el Vanwall VW10, que llevó a Sir Stirling Moss al primer título de constructores de ese equipo hace 66 años. Entre las gemas se incluye una muy especial para los argentinos: la Ferrari 312 T2 con la que Carlos Alberto Reutemann ganó el Gran Premio de Brasil de 1977.
Además, la colección incluye vehículos del equipo Brabham, que Ecclestone dirigió antes de asumir el control de la F1 en 1972, y que tuvo entre sus pilotos al propio Lole Reutemann. Bernie condujo a la Máxima durante más de cuatro décadas mediante la empresa Formula One Management (FOM) y llevó a que sus carreras sean de los eventos deportivos más importantes del mundo. En 2017, Liberty Media compró FOM, Ecclestone describió estos coches como “preciosas obras de arte”, reflejando su profundo aprecio por cada uno de los vehículos que forman parte de este conjunto único.El comprador, Mark Mateschitz, de 32 años, es el único hijo de Dietrich Mateschitz, fundador de Red Bull, quien falleció en octubre de 2022. Mark, quien posee el 49 % de la empresa de bebidas energizantes, expresó su entusiasmo por haber sido elegido como el nuevo propietario de esta colección. “Estoy muy contento de que Bernie haya depositado su confianza en mí para cuidar esta colección de importancia histórica. Se conservará con cuidado, se ampliará a lo largo de los años y, en un futuro próximo, se pondrá a disposición del público en un lugar adecuado”, afirmó Mateschitz.La venta de la colección también responde a una preocupación personal de Ecclestone, quien explicó que su esposa, Fabiana, de 48 años, no sabría qué hacer con los coches en caso de su fallecimiento. “Tengo 94 años y, con suerte, podría tener algunos años más. ¿Quién sabe? Pero no quería dejar a Fabi preguntándose qué hacer con ellos si yo ya no estaba”, comentó. Esta reflexión lo llevó a tomar la decisión de poner en orden sus asuntos y garantizar que su legado automovilístico tuviera un futuro asegurado.
Ecclestone, quien actualmente reside en Gstaad, Suiza, también pasa tiempo en su finca de café en Amparo, Brasil, junto a su esposa y su hijo menor, Ace, de cuatro años y medio. El empresario celebró la venta de la colección recogiendo a su hijo de la escuela en Suiza, un gesto que refleja su deseo de disfrutar de su familia mientras asegura el destino de su preciado garaje.